Cuando iniciamos un negocio es habitual usar la fórmula del renting. Por ejemplo, el equipo informático (ordenadores, impresoras, etcétera). Otro caso muy común: los coches. Y, por supuesto, la maquinaria necesaria para producir los bienes que vendamos. Pero al gestionar tu empresa, ¿cómo contabilizar un renting? Esta es la parte que queremos explicar detalladamente en el artículo.
¿Qué es un renting?
El renting es un alquiler sin opción a compra, a diferencia del leasing. Lo que hacemos es pagar una cuota mensual a cambio del disfrute del bien que se nos cede, nuevo, y en el que se incluye cualquier gasto adicional que pueda recaer sobre él (seguro, reparaciones, mantenimiento).
Lo habitual en este tipo de contratos es que tengan una duración de entre 2 y 5 años, tras los cuales el renting se extingue.
Ahorra tiempo automatizando tu contabilidad
Consulta tus estados financieros en tiempo real, calcula los impuestos por pagar y automatiza la presentación de algunos modelos.
Empieza gratis¿Cómo es el proceso para contabilizar un renting?
Hay distintos bienes que pueden obtenerse a través de la fórmula de renting. Uno de ellos, vehículos que necesitamos para desplazarnos en nuestro horario de trabajo o que son en sí mismos objeto de nuestro negocio (furgonetas de reparto, por ejemplo).
Otro bien que podemos obtener con la fórmula de renting es maquinaria de distinto tipo. Para empezar, es importante saber que el renting se considera un gasto dentro de la contabilidad de tu negocio. Vamos a ver cómo hay que contabilizar un renting de coches y de maquinaria.
Cómo contabilizar un renting de coches
Lo primero que debemos tener en cuenta en cualquier tipo de renting es que en el plano contable este se refleja como gasto. Ya hemos comentado que el renting no da opción de ejecutar una compra al finalizar el contrato. Partimos de la base de que este renting es un contrato de entre 2 y 5 años, el modelo habitual en este tipo de prestaciones.
Por tanto, el renting queda reflejado en tres asientos operativos distintos. La contabilidad del renting se muestra tras hacer los correspondientes cálculos entre el ‘debe’ y el ‘haber’.
Cómo contabilizar un renting por maquinaria
En el ámbito contable, contabilizar el renting para maquinaria es prácticamente igual que el renting de coches, con los asientos contables que ya hemos explicado. Pero es importante conocer a qué uso destinamos dicha maquinaria antes de decidirnos o no por un renting, ya que puede suceder que un leasing sea mejor opción.
De todos modos, el renting supone cuantiosos ahorros. No solo de costes: también de beneficios fiscales.
Cuentas contables que intervienen en el renting
Estos son los asientos que se reflejan cuando recibimos nuestra factura de renting:
- Cuenta 621, correspondiente al nombre ‘Arrendamiento y cánones’. El concepto de este es la ‘contabilización del gasto por alquileres’ y se refleja en el ‘debe’ el gasto que se haya generado.
- Cuenta 472, apartado ‘IVA’. El concepto es el mismo que el del primer asiento contable, ‘Contabilización del gasto por alquileres’. En esta parte debe quedar reflejado el coste del impuesto dentro de la columna ‘debe’.
- Cuenta 410, nombre ‘Acreedores por prestación de servicios’. El concepto sigue siendo el mismo, aunque en este caso el coste debemos reflejarlo en la columna del ‘haber’.
Lo habitual es que los contratos de renting no exijan una fianza, es decir, un cantidad que se le da al arrendador antes de que inicie el contrato, y que cubre posibles daños al vehículo. Pero si es el caso, en nuestra contabilidad esta fianza se reflejará en la cuenta 260 (título ‘Fianzas a largo plazo’), en la columna del ‘debe’.
Los asientos contables al pagar nuestra factura de renting quedarían así:
- Cuenta 410, nombre ‘Acreedores por prestación de servicios’. Apuntamos la cantidad en la columna del ‘debe’.
- Cuenta 572, nombre ‘Bancos’. La cantidad se consigna en la columna del ‘haber’.
Estructura del asiento contable
En términos generales, los asientos contables se estructuran de la siguiente manera:
- Elementos que lo componen. Como mínimo, un asiento contable debe incluir la fecha, el número de asiento, el concepto y las anotaciones correspondientes en el ‘debe’ y en el ‘haber’.
- Partida doble. Es el sistema utilizado en contabilidad, que implica que cada asiento está afectando a dos cuentas contables, el ‘debe’ y el ‘haber’.
- Los asientos contables deben estar cuadrados. Dicho de otra manera, los movimientos del ‘debe’ deben coincidir en cantidad con los del ‘haber’.
¿Cómo influye el IVA al contabilizar un renting?
Con carácter general, el IVA sobre un renting es del 21%. Ahora bien, ¿qué ventajas fiscales tiene el renting para empresas y autónomos? Lo vemos.
El IVA del renting para las empresas
Si el vehículo que destinamos al renting es de uso exclusivo profesional(la maquinaria, obviamente, solo tendrá este uso), podemos llegar a descontarnos el 100% del IVA. Con esto debemos tener cuidado, ya que si Hacienda comprueba que se hace un uso particular del mismo, no vamos a poder optar a esta reducción o, peor aún, nos puede exigir la devolución de la deducción y multarnos.
Es decir, un camión, por ejemplo, es muy probable que sea de uso 100% profesional, pero el coche que utilizamos para visitar a nuestros clientes puede ser también el que usemos fuera del horario laboral para recoger a los niños del colegio o salir de viaje, por ejemplo. En este último caso hablamos de un uso mixto, lo que no quiere decir que no nos podamos desgravar el IVA, pero no al 100%, sino hasta un máximo del 50%.
Las ventajas fiscales del renting en el caso de las empresas también se pueden solicitar en tu IRPF y en el Impuesto de Sociedades.
IVA en el renting de los autónomos
El caso es muy similar, en lo que a deducciones se refiere, que en el renting para empresas. Advertimos, igual que en el apartado anterior, que hay que ser cuidadoso con el uso que se hace del vehículo. Si es de uso mixto, podremos deducirnos como mucho el 50% del IVA.
Si nuestro vehículo es un modelo industrial (furgoneta, camión) es más sencillo demostrar el uso profesional. Pero si contamos con un utilitario o una berlina (un coche, en definitiva), Hacienda va a mirar con lupa que no le estemos dando un uso mixto.
Ejemplos
Vamos a ver en tablas cuáles son las cuentas contables que aparecen en este tipo de contratos de renting. Como hemos visto, los asientos son iguales en un renting de un vehículo, de maquinaria pesada, de equipos informáticos, etcétera.
Tenemos un renting por un vehículo a 4 años por el que pagamos una cuota mensual de 605 euros IVA incluido:
CUENTA | NOMBRE | CONCEPTO | DEBE | HABER |
621 | Arrendamientos y cánones | Contabilización del gasto por alquileres | 500 euros | |
472 | IVA | Contabilización del gasto por alquileres | 105 euros | |
410 | Acreedores por prestación de servicios | Contabilización del gasto por alquileres | 605 euros |
Veamos cómo queda nuestra contabilidad al pagar esa factura.
CUENTA | NOMBRE | DEBE | HABER |
410 | Acreedores por prestación de servicios | 605 euros | |
572 | Bancos | 605 euros |
Conclusiones
Antes de iniciar el proceso de renting, necesitamos saber, primero, que este computa como gasto, pero que todos los gastos derivados del mismo son deducibles. En el plano fiscal, el renting puede llegar a ser enormemente ventajoso.
Pero contabilizarlo puede llegar a ser complicado de entender si no conocemos a fondo la contabilidad. Por suerte, existen programas que realizan de forma automatizada todo este tipo de trabajos, como el programa de contabilidad de Holded. El libro diario se actualiza solo, puedes importar y exportar tu contabilidad y no debes temer que las cuentas se descuadren: una preocupación menos.
Preguntas frecuentes
¿En qué se diferencia un leasing de un renting a nivel contable?
El renting, como comentábamos al principio del artículo, es un alquiler sin opción a compra, y el leasing es un alquiler con opción a compra. Es decir, se paga una cuota mensual al igual que el renting, pero al finalizar el contrato puedes quedarte el bien mueble o inmueble (o cambiarlo por otro, o devolverlo).
En el plano contable, el leasing es un arrendamiento financiero y el renting, uno operativo. En este enlace te explicamos cómo contabilizar un leasing.
¿Qué ocurre si no se contabiliza un renting?
A efectos fiscales, no contabilizar un gasto no te va a penalizar. Pero no vas a poder acceder a las deducciones fiscales que implicaría hacerlo. Así que te conviene contabilizar un renting siempre.